Los docentes en Caracas y al menos 15 estados del país anunciaron que van a protestar el próximo lunes 5 de octubre en las sedes de las Inspectorías del Trabajo para rechazar el llamado a clases a distancia hecho por el gobierno de Nicolás Maduro y para exigir mejores reivindicaciones salariales.
En varias ocasiones y antes del inicio de actividades escolares ordenadas por Maduro para el 16 de septiembre, el gremio de maestros habían manifestado que no se iban a incorporar a las clases debido a los bajos sueldos que perciben y por estar desprovistos de recursos para asumir el reto de dar clases vía internet como falta de computadoras o teléfonos inteligentes en muchos casos, fallas en servicios públicos como agua, luz y conexión a la red.
También expresaban que las condiciones en las aulas de clase daban mucho qué desear y señalaban que si en los centros de salud no se estaban protegiendo a los médicos de la covid-19, menos sucedería en las escuelas del país.
Incluso, después de la fecha señalada por las autoridades, el 90% de los educadores no obedecieron y planean no hacerlo hasta que mejorensus condiciones laborales. No se presentaron en los centros educativos ni dio inicio a clases virtuales.
En ese sentido, la secretaria de contratación colectiva y reclamos del Sindicato Venezolano de Maestros del Distrito Capital, Gricelda Sánchez, anunció este martes 29 de septiembre que el gremio docente en Caracas se movilizará al Ministerio del Trabajo -ubicado en la Plaza Caracas- para exigir mejores condiciones para dar clases, que incluye un sueldo base de $600, que según los expertos es el que cubriría la canasta básica y por ende, lo que estipula la Constitución.
Sánchez explicó que los maestros no están de paro sino «inhabilitados» para iniciar sus labores como es debido por considerar que no cuentan con condiciones mínimas de vida. “Nosotros estamos en rebeldía, ya que no vamos a contribuir con la farsa de la educación a distancia y con esto destruir la educación en Venezuela”, dijo según una nota de prensa.
Afirmó que la convocatoria de la actividad de calle es en el Ministerio del Trabajo -cartera presidida por Eduardo Piñate- porque allí fueron algunas federaciones a presentar un pliego petitorio, donde detallan cuáles son las necesidades que deben cumplirse para que los maestros regresen a clases.
Por su parte, el presidente del Sindicato Unitario del Magisterio seccional Zulia, Gualberto Mas y Rubi, recalcó que no es un buen momento para la educación en Venezuela debido al mal estado de los planteles y la casi imposible tarea de llevar a cabo clases semipresenciales, como ordenó Maduro en días pasados al decir que a partir de octubre las escuelas serían «centros pedagógicos» para atender a los alumnos.
“Además de un llamado a la educación a distancia donde en los hogares de los alumnos y maestros no tenemos la conexión debida, tanto de servicio eléctrico como de internet, son nulas siendo esta modalidad de clases online una gran estafa”, advirtió.
Los docentes han argumentado, al igual que otros trabajadores del sector público, que su salario fue «pulverizado» tras la eliminación de los convenios alcanzados en luchas sindicales luego que se «aglutinara» todos esos beneficios en un salario mínimo integral de BsS 800.000, que a la fecha no suman ni dos dólares.