La Curva de la Violencia correspondiente al primer trimestre del año 2021 deja al descubierto la situación de vulnerabilidad que vive la población venezolana, en especial de la región suroccidental fronteriza ante la presencia de grupos armados irregulares que, con la autorización y la complacencia del Estado se han convertido en los dueños de estos territorios ejerciendo la fuerza para amedrentar, así lo aseguró Luis Useche, gerente jurídico de FundaRedes durante la presentación del informe.
Useche explicó que, frente a la vulnerabilidad de la población y ante la violencia estatal en Venezuela, se han manifestado representantes de instancias multilaterales como Naciones Unidas y de organizaciones internacionales como Human Rights Watch y Amnistía Internacional, las cuales han emitido informes y
pronunciamientos sobre los crecientes abusos policiales y militares que conllevan a muertes, desapariciones, simulaciones de enfrentamientos, torturas y tratos crueles, así como la impunidad
que fomenta la repetición de los hechos.
Aseguró el vocero que las cifras demuestran cómo los organismos de seguridad, se constituyeron en los
principales responsables de las muertes violentas en las entidades objeto de documentación.
En tal sentido recordó que la Curva de la violencia de FundaRedes ofrece el resultado de su labor de
monitoreo y documentación en tres unidades de análisis: homicidios, desapariciones y/o
secuestros y enfrentamientos armados, que constituyen los principales delitos en los seis estados fronterizos del país que se documentan: Apure, Amazonas, Bolívar, Falcón, Táchira y Zulia..
Destacó en el mes de marzo de 2021 la situación de conflicto armado en el estado Apure, que llevó a quienes ocupan el poder a reconocer la presencia de grupos armados irregulares en Venezuela, los cuales controlan grandes extensiones de territorio y están fuertemente armados. “En Apure lejos de ejercer una acción de limpieza de todos los grupos armados irregulares, la Fuerza Armada solo se enfrenta a un sector de las FARC”.
Es así como, la Curva de la Violencia registró entre enero y marzo de 2021 un total de 306 homicidios en 6 estados fronterizos; de ellos 161 corresponden a muertes en presuntos enfrentamientos con cuerpos de seguridad.
Uno de los hallazgos más resaltantes en este primer trimestre del año es el aumento en los casos de desapariciones y/o secuestros: 77 hechos frente a los 61 registrados en el mismo período de 2020; es decir, un incremento de 26,23%.
Igualmente en el primer trimestre de 2021 ocurrieron 113 presuntos enfrentamientos que involucran a
organismos de seguridad del Estado y que dejaron 161 víctimas. Estos hechos generalmente son considerados ejecuciones extrajudiciales por expertos en seguridad ciudadana y derechos humanos, aunque son reportados oficialmente como enfrentamientos para justificar el uso de las
armas, indica la Curva de la Violencia.
El equipo de activistas y defensores de derechos humanos continuará su labor de documentar la violencia que ocurre en la frontera venezolana, para vencer el silencio y la opacidad que pretende imponer el Estado frente a la vulneración a la población desprotegida.
El informe curva de la violencia está disponible en el sitio www.fundaredes.org donde también pueden consultar el total de registros hechos durante todo el año 2020. (Prensa FundaRedes).