Juan Vicente Pérez Mora, conocido por sus allegados como «Don Vicente», celebró el pasado 27 de mayo sus 112 años, siendo actualmente el hombre más longevo de Venezuela.
Nació en la población de El Cobre, estado Táchira, el 27 de mayo de 1909, siendo el menor de ocho hermanos. A los cuatro años de edad, se mudó junto a su familia a San José de Bolívar, donde ha vivido desde entonces.
Trabajando en una finca en la aldea Los Paujiles, conoció a Ediofina García, quien se convertiría en su esposa, en una ceremonia celebrada en Queniquea, bajo la bendición del padre Moncada, y de la cual nacieron once hijos.
Hace 24 años, Dios llamó a Ediofina, dejándolo viudo, y viendo partir también a sus hermanos y algunos de sus hijos, dejándole recuerdos tristes. Sin embargo, sus nietos y amigos le recuerdan que es un misionero, y por eso aún no ha llegado su momento de partir.
Don Vicente es descrito como un hombre tradicional, un campesino común que nunca pretendió involucrarse en temas políticos o figurar en ningún aspecto de la vida pública y, que ahora resalta por su edad, su forma de ser y su crianza a la familia.
“Tío Vicente” no conoció el reloj, aprendió las horas leyendo el sol; es un hombre rural y sencillo pero con un corazón noble y lleno de amor. Parte de la rutina diaria de Juan Vicente consiste en rezar cuatro veces al día y siempre mantiene una camándula en el bolsillo de su camisa. Él ha mantenido siempre su respeto y devoción hacia Dios.