Vecinos del barrio La Guajira y de una parte de la finca La Fortuna, en el municipio Pedro María Ureña, viven en condiciones de insalubridad debido a las aguas servidas que caen a esta zona afectando a más de un centenar de personas.
El concejal de dicha jurisdicción, Carlos Taborda explicó que, de forma reiterada se ha pedido auxilio a la Gobernación del estado Táchira y Consejo Legislativo Estadal, para que a través de las comisiones de servicios públicos se gire la mirada a esta problemática.
En este sentido, detalló que al lugar arriban los líquidos provenientes de la urbanización La Villa, Plaza Vieja Ruíz Pineda, que ocasionan olores nauseabundos que a su momento podrían generar enfermedades respiratorias en niños, jóvenes y adultos.
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“La quebrada La Hedionda a la altura del barrio Las Flores se encuentran colapsada y por tanto es urgente que se arreglen las cloacas para que de una vez las familias puedan tener una calidad de vida, y más aún cuando se acerca la navidad y año nuevo, fechas en las cuales ellos quieren tener un ambiente sano” dijo.
Precisó que la Alcaldía de Pedro María Ureña se encuentra “desconectada” de las comunidades, pues no escuchan a estos vecinos que se encuentran en emergencia desde hace varias semanas.
“La falta de intervención hizo que la Alcaldía desmejorara la calidad de vida de los habitantes, quienes no ven una solución a corto plazo en este grave problema” dijo.
Lavanderías
El Concejal, Ángel Araque, denunció que en algunas zonas de Ureña, se han puesto en funcionamiento algunas lavanderías, las cuales no cuentan con la permisologia correspondiente para prestar sus servicios en el municipio.
“La Alcaldía siendo una irresponsable no está haciendo inspecciones a estos comercios para verificar a estas lavanderías que para funcionar, deben tener los respectivos filtros y así no colapsen las cloacas” aseveró.
Destacó que, si estos establecimientos comerciales no se van ajustar a la normativa establecida, las mismas deben ser trasladadas hacia la zona industrial de Ureña.
“Necesitamos urgente el arreglo de las cloacas y así las familias no se vean afectadas con este problema” apuntó.
Filtraciones
Una de las vecinas, Rita Prada, acotó que, producto de las aguas servidas, las paredes de las viviendas presentan filtraciones, por lo cual alertó el colapso de las estructuras.
“Las lavanderías nos tienen en pésimas condiciones las cloacas, por lo que estamos en emergencia ante esto” añadió.
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Esto ha traído la proliferación de algunos animales como, los reptiles Tupinambis teguxim o matos polleros, cuyos reptiles se comen las gallinas.
“Estamos contaminados y no podemos seguir viviendo así, a pesar de los llamados al alcalde Yhon Carrillo no hemos obtenido respuesta, pues hace 15 días nos avisaron que vendría y nos quedamos esperando porque nunca llegó” acotó.
Agregó Prada que si la pandemia del COVID-19 no los “mató” los olores nauseabundos sí lo harán.