La investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno español fracasó tras abstenerse el partido de la izquierda Unidos Podemos, lo que impidió alcanzar la mayoría de votos en el Congreso.
El dirigente opositor obtuvo 124 votos a favor, frente a 155 negativos y 67 abstenciones.
Sánchez constató que “el acuerdo no ha sido posible” y lamentó la pérdida de una “histórica oportunidad” para formar un Ejecutivo de izquierdas.
Aseguró que Pablo Iglesias quería entrar al Gobierno español “para controlarlo”.
Con información de El Impulso