San Abdias vivió entre los siglos IX y VI a.C. Su profecía se desarrolló en una momento belicoso y plagado de caos en la historia de Israel, la cual se caracterizó por frecuentes conflictos los reinos de Israel y Judá, además de las interminables invasiones promovidas por los extranjeros.
El santo es uno de los doce profetas menores del Antiguo Testamento. Su libro, considerado uno de los más breves de la Biblia, condensa un mensaje de justicia y castigo divinos.
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“Abdías es un profeta enigmático cuya vida está poco documentada en las Escrituras y la tradición. Sin embargo, sus escritos y su papel profético ofrecen profundas enseñanzas sobre la soberanía de Dios y el triunfo del bien sobre el mal”.
El texto del santo está dirigido al pueblo de Edom, descendientes de Esaú, hermano de Jacob. El cual mantenía una compleja relación anómala con Israel, pese a que ambos los unían antepasados en común. Sin embargo, las controversias y combates eran constantes que dieron como resultado una serie de desgracias para el pueblo de Judá.
“Abdias denuncia el orgullo y la crueldad de los edomitas, que aprovecharon la caída de Jerusalén para saquear la ciudad y oprimir a sus habitantes. Su mensaje profético proclama la justicia divina, advirtiendo a Edom de las consecuencias de sus actos y anunciando la restauración del pueblo de Dios”.

El mensaje del santo es atemporal y sólido el recuerda a través de su profecía “que Dios es soberano, que la justicia prevalecerá y que el bien triunfará sobre el mal”, sus palabras representan una guía para los creyentes a quienes los invita a vivir con fe, humildad y esperanza, hasta la llegada del reino de Dios.
Oración
Deshagámonos del miedo arrancado de la mano del enemigo
sirvámosle con santidad y justicia, frente a él, todos nuestros días.
Tú, niño, serás llamado profeta del Altísimo, porque estarás frente al santo profeta Abdías.
La forma de prepararlos, declara salvo a su pueblo, perdón de los pecados.
Por la misericordia de nuestro Dios, el sol que sale de arriba nos visitará, inspirar a los que viven en la oscuridad.
A la sombra de la muerte pasos para guiarnos camino a la paz.
Amén.
Carlos A. Ramírez B.



