Todo un revolucionario cambio en la manera de comunicarse e interactuar con los fieles, están viviendo los sacerdotes de todo el mundo, debido a la emergencia sanitaria, decretada por la Organización Mundial de la Salud, producto de la Pandemia generada por el Covid19
Yalín Pernía
En el reportaje anterior, quedó evidenciado, tanto por parte de los laicos, como de los sacerdotes y religiosos, entrevistados, que indudablemente luego de la Cuarentena, la forma del proceso tradicional de evangelización, cambiará para siempre.
De ahora en adelante además de contar con el plus de las redes sociales, las cuales, de alguna manera, vinieron a fortalecer la cotidianidad en las comunidades, los hogares, y el discipulado familiar que conforman la Iglesia Doméstica del mundo entero, ya existe un condicionamiento y aprendizaje sicológico grabado en el colectivo.
El altar en la casa, que en la mayoría de los casos no existían, y se armó, por petición de muchos párrocos, que iniciaron la solicitud, en los días previos de la Semana Mayor, el rezo del Santo Rosario, la Coronilla de la Divina Misericordia, el Viacrucis, el Vía Lucis, los subsidios y las reuniones familiares que se efectuaron en función de las celebraciones de la Semana Santa, reflexión del evangelio del día, horas santas y trasmisiones eucarísticas, han generado cambios dentro de la dinámica familiar, que seguramente van a permanecer en el tiempo.
En relación a esto, Pbro. Joel Escalante, Párroco de la iglesia El Buen Pastor, de Puente Real, de San Cristóbal, asegura que algunas cosas que se están realizando actualmente en su parroquia, por la contingencia, se van a tener que continuar al término de la Cuarentena; pues considera que la gente se ha sentido acompañada y ya se ha acostumbrado a esta nueva modalidad.
Por su parte, el Padre Leopoldo Sayegh, quien se encuentra en la Pastoral Juvenil y Familiar de Paris, recalcaba lo beneficioso y necesario de seguir el proceso de evangelización digital, a través de las redes sociales, pues pese a manifestar tener muy claro que la vida de la iglesia, se da en comunidades, con la participación frecuente a los sacramentos y el encuentro personal, manifestaba que este tiempo ha demostrado la capacidad de generar un dinamismo evangelizador y entusiasta, a través de la oferta de contenido y medios espirituales, enriqueciendo de algún modo, con el intercambio de ideas, el llamado del papa francisco, a hacer lío, porque se ha dado un auténtico compartir de los bienes espirituales al encuentro del que necesita del amor y misericordia de Dios.
¿Bendición y Comunión Virtual?
Al hablar de la Bendición y Comunión espiritual, el Pbro. Joel Escalante, explicó que la Comunión no solamente es recibir a Cristo en la Hostia Consagrada, sino estar en Común Unión, con las enseñanzas que dejó Jesús, el Papa, el Obispo, la Pastoral de la Diócesis y directrices del Párroco. Partiendo de esto, entendemos que la Comunión Espiritual es recibir a Cristo. Y el Señor sabe que sus fieles anhelan recibirlo, mientras esto pasa, recomienda hacer las oraciones de preparación espiritual.
Agregaba además, que todas las bendiciones impartidas por los sacerdotes, a través de cualquier medio, eran totalmente válidas, pues cuando los fieles se reúnen entorno a la fe, ya sea con un audio o video, entran en Común Unión, y allí está Jesucristo; porque Dios dijo, donde tres o dos se reúnen en mi nombre, allí estaré, entonces las bendiciones llegan a los hogares, sin duda alguna; así como cuando el Papa imparte la Bendiciones, Urbi et Orbi, que fue trasmitida por Televisión, igual esa bendición llegó a nosotros y a todas las personas que la vieron y se unieron en fe.
La Distancia nos unió
Irónicamente la situación de la cuarentena, generó una dinámica digital, que de alguna manera dinamizó el intercambio transcultural entre continentes, incluso, al respecto todos los religiosos entrevistados coincidieron en estar impresionados ante tanta dinámica e intercambio de buenas iniciativas digitales.
Al respecto, el Padre Sayeg, manifestaba que ha sido invitado, a videoconferencias en vivo, el rezo del rosario en línea, la participación en podcasts, iniciativas de producción de contenido, en equipo con otros agentes de pastoral en distintas partes del mundo. Además de haber visto formarse un sinfín de grupos interculturales de jóvenes que están haciendo videos comentando el Evangelio del día, parejas que se preparan al matrimonio, se están reuniendo en línea para tener círculos de reflexión sobre los temas de su preparación matrimonial.
Manifestando que todo esto, enriquece a las personas, porque les ha puesto en contacto no sólo con el círculo cercano con quienes están siempre, sino que le ha abierto a la posibilidad de enriquecerse de la experiencia de Dios de personas que están en otras ciudades y países.
En este mismo orden, el Pbro. Joel Escalante, señalaba que, a través de cadenas de audios por WhatsApp, trasmisiones y publicaciones en Instagram, video llamadas, ha llevado su mensaje pastoral a más de 40.000 personas de todas partes del mundo, recibiendo reportes desde Arabia Saudita y diversas partes de Europa, América Latina, estados Unidos.
El padre Jorge Reinaudo, quien se considera promotor de la Iglesia Doméstica, explicaba, desde Buenos Aires, Argentina, manifestaba que él ha definido este tiempo como “modo Cuarentena con Dios”, el cual es tratar de hacer que las familias crezcan en conocimiento y puedan sentir la presencia de Dios en cada hogar, vinculándose de un nuevo modo con él, yendo más allá de lo digital, para llegar a los hogares con la Bendición de Dios, que trasciende y traspasa la pantalla de cualquier medio.
Por su parte, el Pbro. Delvis García, desde su parroquia San Sebastián, ubicada en la capital del Estado Vargas, en Venezuela, considera que es el momento oportuno, para dar los lineamientos y activar al máximo el funcionamiento de la manifestación de la fe, en la iglesia doméstica con la daridad y piedad, entre vecinos y familiares, para esta unidos en la adversidad.
El Vaticano ha hecho lo suyo
Haciendo un poco de historia, recordamos que la Iglesia Católica venía coqueteando en las redes sociales, a través de algunos pastores, desde finales del siglo XX y principios del XXI, pero no es sino hasta el 2009, cuando el Vaticano, a través de su mensaje en la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, reconoce la necesidad de ir más allá del fenómeno más mediático a la comunicación digital.
Ese mismo año, 2009, el Papa señala que el valor de la amistad se había intensificado, producto al éxito de las redes sociales, y el año siguiente, propuso, sin mucho eco, el mundo digital como, un ámbito de acción pastoral para los sacerdotes.
Sin embargo, el 12 de diciembre de 2012, el papa Benedicto XVI, abrió lo que hoy día, es considerado como la puerta de entrada de la Iglesia, en las Redes Sociales, cuando publicó su primer Tuit, señalando, …¨me uno a vosotros con alegría por medio de Twitter¨…
Hecho que el profesor Pablo Blanco, teólogo de la Universidad de Navarra y biógrafo del Papa Benedicto, tradujo como; «Lo que el Papa buscaba con este gesto valiente era anunciar el Evangelio en el mundo actual«, ratificando desde entonces, la necesidad de evangelizar en lo que algunos autores definen como el continente digital.
Necesidad reforzada, seis meses después, en el Mensaje del Santo Padre en la XLVII Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, donde señaló que las redes digitales están “[…]contribuyendo a que surja una nueva «ágora», una plaza pública y abierta en la que las personas comparten ideas, informaciones, opiniones, y donde, además, nacen nuevas relaciones y formas de comunidad”, evidenciando explícitamente la existencia de “lugares” para la evangelización.
Este camino es secundado, aunque de un modo más discreto y silente, en un principio, por el Papa Francisco, quien dio también un empujón a esta evolución del acercamiento magisterial católico al mundo de las comunicaciones en sus alocuciones del 2014 y 2016 al insertar ese mundo en la dinámica del servicio en la “cultura del encuentro” y la ¨proximidad como el poder de la Comunicación.
Es hasta el 19 de marzo de 2016, que decide abrir una cuenta en Instagram, en el marco del Jubileo de la Misericordia, con el siguiente mensaje: ¨Inicio un nuevo camino, en Instagram, para recorrer con ustedes el camino de la misericordia y de la ternura de Dios¨. Actualmente, la cuenta oficial del Papa Francisco, en Instagram, @Franciscus, ha superado los 7,1 millones de seguidores y cuenta con 887 post publicados, entre imágenes y videos del Santo Padre, acompañado por un pequeño texto descriptivo redactado en 5 idiomas; inglés, portugués, español, italiano y francés.
