Este martes fue aprobada por el gobierno de Cabo Verde la extradición hacia los Estados Unidos del empresario colombiano Alex Saab, considerado por el gobierno de Donald Trump como el testaferro más importante del gobierno de Nicolás Maduro.
El Ejecutivo del país africano avaló la extradición sobre la base de “la opinión judicial favorable de la Procuraduría General de la República (PGR)”, enviada el pasado día 8, para su revisión, al Tribunal de Apelaciones de Barlavento, con sede en la isla de San Vicente (norte del archipiélago), que asumirá la deliberación final, afirmó Pinto.
Saab fue arrestado el pasado 12 de junio cuando el avión en el que se trasladaba hizo escala para repostar en el Aeropuerto Internacional Amílcar Cabral de la isla norteña de Sal en respuesta a una petición de los Estados Unidos a través de Interpol por delitos de lavado de capitales.
Sin embargo, la defensa tiene plazo hasta el jueves para interponer un recurso contra la decisión del Gobierno de Cabo Verde, ante la la corte. Si no lograse una orden favorable a sus reclamos, Saab podría aún apelar ante el Supremo Tribunal de Justicia (STJ) y, en última instancia, presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.
“Nuestro equipo está trabajando con optimismo para obtener los resultados definidos, es decir, la liberación inmediata de nuestro cliente”, aseguró Pinto en conversación telefónica en Praia, la capital caboverdiana.
A este equipo de abogados defensores de Alex Saab se unió el famoso ex juez español, Baltazar Garzón quien va a “liderar un proceso contra EEUU y Cabo Verde ante el Tribunal Internacional (de Justicia) de La Haya por la violación de la inmunidad jurisdiccional de Álex Saab”, dijo Pinto a los medios de comunicación.