El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, informó sobre la salud del Papa Francisco quien se encuentra hospitalizado desde el pasado 14 de febrero. Dijo que respira de forma autónoma y continúa la terapia prescrita por el personal médico.
El Papa hizo un llamada a la parroquia de Gaza. Delegó a monseñor Fisichella la celebración de la misa del domingo en la Basílica de San Pedro con motivo del Jubileo de los Diáconos.
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Sostuvo que los resultados de los análisis realizados en los últimos días han determinado que se trata de una infección polimicrobiana de las vías respiratorias. Así lo comunicó el portavoz vaticano, Matteo Bruni, a los numerosos periodistas congregados en la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
“En estos momentos el Pontífice respira de forma autónoma”, precisó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, y sigue la indicación de «reposo absoluto» prescrita por el personal médico que le atiende desde hace cuatro días. Esta es la razón por la que el Papa no dirigió la oración del Ángelus el domingo.
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Es por ello que se canceló los compromisos del sábado 22 de febrero, mientras que la misa prevista el domingo 23 de febrero, a las 9 de la mañana, en la Basílica de San Pedro, por el Jubileo de los Diáconos, el Papa Francisco determinó que la presida monseñor Rino Fisichella, pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización.
El Santo Padre también está recibiendo cientos de mensajes de buenos deseos por una buena recuperación, así como dibujos y tarjetas. Algunos de ellos proceden de los niños ingresados en el Hospital Gemelli, en particular los de la sala de oncología, sus vecinos de la décima planta, a los que el Papa nunca ha dejado de visitar en sus anteriores estancias en el centro sanitario.
Con información de Vatican News