Daniel Neves, el niño brasileño que pintaba cuadros de santos para costear sus tratamientos médicos, falleció el pasado 18 de mayo debido a complicaciones por su enfermedad. Así lo informaron sus familiares a través de la cuenta de Instagram @danielxneves en una imagen con un texto en portugués.
Desde sus ocho meses de edad, Daniel fue diagnosticado con poliquistosis renal, fibrosis hepática y problemas de bazo, enfermedades que lo hicieron pasar prácticamente toda su vida en el hospital. A los cinco años, sus riñones dejaron de funcionar, debiendo someterse a hemodiálisis cada semana, fue en esas sesiones que Daniel comenzó a dibujar retratos de Santos y Virgenes para evitar aburrirse.
Posteriormente, sus dibujos comenzaron a venderse para ayudar a costear sus tratamientos médicos, y su historia conmovió a miles, que desde distintos países se sumaron a la campaña promovida por voaa_vaquinhadorazoes, una fundación brasileña que ayudó a recaudar fondos para los gastos hospitalarios y traslado de Daniel y su madre Cleide, que debían viajar frecuentemente para algunas intervenciones que requería el menor.
Daniel, entre tantos retratos que hizo, dibujó a una virgen especial que él mismo llamó «Nuestra Señora de los Riñones», como una oración muy particular para que la virgen guiara a los médicos en cada intervención que le practicaban.
Finalmente, a sus 13 años, Daniel Neves partió de este mundo tras haber luchado toda su vida con múltiples afecciones, pero dejando un testimonio de fe en miles de personas de todo el mundo.