Como es ya una tradición consolidada antes de cada viaje apostólico, esta tarde, en vísperas de su peregrinación a Chipre y Grecia, el Papa se dirigió en coche a la Basílica de Santa María la Mayor para encomendar a la Virgen su 35º viaje internacional.
«En la tarde de hoy, 1 de diciembre, el Papa Francisco acudió a la Basílica de Santa María la Mayor para rezar ante la imagen de la Virgen Salus Populi Romani y encomendarle su próximo viaje a Chipre y Grecia. Al final de la visita regresó al Vaticano», informa la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Desde el inicio de su pontificado, antes de partir hacia el extranjero, Francisco reza durante varios minutos a solas frente a la imagen mariana que se conserva en la Capilla Borghese, tan querida por el pueblo de Roma. También para este viaje a Chipre y Grecia, que tendrá lugar desde mañana 2 de diciembre hasta el lunes 6, el Papa ha pedido la protección de la Virgen.
Asimismo, esta mañana, al final de su audiencia general, el Pontífice hizo un llamamiento al pueblo de Dios para que acompañe con la oración esta visita apostólica a las «fuentes» de la fe y la fraternidad ecuménica, durante la cual, con la parada en Lesbos, tendrá la oportunidad de acercarse a la «humanidad herida» de miles de migrantes en los campos de refugiados.