Jorge Arreaza, ministro de Relaciones Exteriores de la administración de Nicolás Maduro, emitió un comunicado el miércoles 2 de junio en rechazo a la decisión de Colombia de reabrir los pasos fronterizos con Venezuela y la calificó de «unilateral».
Considera que la contradicción en la decisión de Colombia en abrir la frontera el 1° de junio, cuando el 31 de mayo había dicho que permanecerían cerrada hasta septiembre, es una especie de «emboscada fronteriza» por parte del gobierno de Iván Duque para «distraer la opinión pública ante los notorios hechos de violaciones continuadas de DDHH» que se han visto en las protestas en el vecino país.
Por eso, Arreazahizo un llamado a las autoridades colombianas de avanzar en una «coordinación bilateral» para abrir las fronteras de forma conjunta y no «unilateral»; política que debe ser acompañada con un plan que incluya la coordinación de las medidas de seguridad, comerciales y sanitarias, enfatizando los protocolos contra la covid-19.
A su juicio, «ninguna decisión desesperada y unilateral es efectiva» y acotó que el Gobierno de Colombia debe abordar «con seriedad» los asuntos fronterizos porque debe existir un «apego» al Derecho Internacional.