Rafael Alberto Sánchez Contreras es un abogado de 54 años, padre de dos hijas y dueño de una visión de desarrollo y avance basado en las necesidades del mercado y enmarcada en una ayuda constante a quienes lo necesiten sin dejar de un lado el fundamento real de un negocio.
Sánchez, quien regresa a Venezuela luego de emprender un viaje a España, que se dilató cinco años, argumentó que la decisión de ser inmigrante se cristalizó con la fluctuante economía que limitó sus ingresos.
“Fue muy difícil mantenerme en el campo jurídico entonces me fui para España (…), después me di cuenta que debía regresar a Venezuela para plantar nuevamente cara para hacer una cartera de clientes nueva, pero mientras eso sucedía, en un lapso prudencial de ocho a nueve meses para volver a establecerme, surgió esta idea”.
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Durante un lustro salió del país en búsqueda de soluciones que favorecieran su condición económica, sin embargo, desde hace tres meses la decisión de regresar a la patria fue más sólida y retornó con distintas propuestas, la primera retomar su profesión y la, segunda, fomentar un emprendimiento que además de mejorar sus ingresos sirviera de cobijo para aquellos que no tuvieran.
“La idea era emprender con un negocio de movimiento rápido de alta rotación y por ello tomé en cuenta el tema del calor, el sol y dije hay que hacer jugos naturales, algo económico para que la gente pueda consumir con poco dinero, con proteínas”.
Sánchez motivado por su llegada al país optó por seguir con su carrera sin dejar a un lado sus responsabilidades inmediatas de padre, si bien es cierto la idea de Granizado´s, es la obtención de efectivo de manera rápida para mantener su familia era necesario erigirse como emprendedor bajo sólidas bases de negocio y calidad del producto.
“Nacimos por la necesidad imperiosa de asirse de un recurso económico diario o por lo menos semanal, quincenal o mensual para el mantenimiento del hogar (…) sigo trabajando en el derecho, pero duré cinco años fuera del país porque me fui asustado ya que tenía que cumplir con las obligaciones especialmente del mantenimiento de mis hijas desde el punto de vista económico”.
Planes
La nueva batalla tiene poco tiempo de estar activa en Táriba, capital del municipio Cárdenas, sin embargo, ya son innumerables los usuarios que ante la arremetida del clima buscan un lugar donde puedan refrescarse y que no tenga un alto costo que descalabre la económica doméstica.
Sumado a esto, la idea altruista de Sánchez va más allá y prevé a corto plazo estabilizar su emprendimiento y darles paso a dos trabajadores, quienes seguirán regentando el negocio con la calidad del producto y la atención de primera que se están generando en estos primeros pasos de desarrollo.
“Mis planes son estabilizar este negocio para poder darle oportunidad a dos personas que no tengan trabajo (…) ya cuando sepa que el negocio es rentable puedo contratarlos pagando mucho más del salario mínimo”.
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Sánchez aduce que es necesario marcar un hito de la producción de granizados y, para ello, es indispensable utilizar materia prima de calidad la cual será aprobada o reprobada por el usuario en el momento que consuma el producto.
“Nosotros trabajamos con agua mineral porque somos cuidadosos con el tema de la salud (…) no escatimamos en dar casi el 25 por ciento del producto es decir si tu consumes vas a sentir la diferencia en calidad (…) eso es lo que nos distingue ya que apostamos no solo por nuestro beneficio sino por el beneficio del cliente”.
Exceso
El jurista convertido en emprendedor señala como elementos negativos la presión para el pago de los tributos municipales, el cual está cargado de señalamientos que minimizan el interés de proponer negocios que generen puestos de empleo y movimiento económico local.
“Han venido a quitarnos dinero en el tema de la alcaldía, asustarnos porque somos nuevos y no tenemos la estructura legal para hacer frente a todos los requerimientos (…) hay cobros excesivos en servicios públicos que ni siquiera son materia prima de los negocios”.
Pese a ello, Sánchez esgrime que su negocio se levanta a fuerza de trabajo sin descanso, solo para el cumplimiento de las metas en favor particular sin olvidar el bien común.
“Hay que tener voluntad, trabajo consecutivo (…) nos levantamos a las cinco de la mañana y nos vamos a las nueve de la noche (…) somos constantes”.
Apoyo
Sánchez está arraigado a Dios y con ello, arguye que la fortaleza de cualquier emprendimiento está dado con el fervor y fidelidad que genera la fe.
“Cuando tu estas agarrado de la mano de Dios se te acaba el azúcar y llega alguien a comprarte un jugo y con esa plata vas y lo compras y así continuas (…) es maravilloso, fundamentalmente tienes que estar enamorado de Dios (…) no es solo decirlo de boca para afuera tienes que pregonarlo con tu comportamiento”.
Insiste en su compromiso con el prójimo y con ello su emprendimiento atiende, sin ninguna necesidad de ser protagonista, a quienes requieran de una mano amiga que les socorra en los momentos de infortunio.
“Aquí ha llegado gente que no tiene nada que comer y nosotros le damos un poquito de agua panela y un pastelito todo para ayudar a las personas porque sabemos que la situación está muy difícil y nosotros hemos pasado por esta situación por eso queremos dar ese aporte (…) no es promoción es un compromiso que va más allá”.
Carlos Ramírez