Este sábado se realizó la cuarta edición del Encuentro Mariano de la Diócesis de San Cristóbal, actividad organizada y convocada por la Pastoral Juvenil, que tuvo como anfitriona a la parroquia Nuestra Señora de Coromoto.
Cerca de mil jóvenes provenientes de las comunidades eclesiásticas de la Diócesis se encontraron en el colegio Coromoto para recordar y celebrar el Sí de la madre de Nuestro Señor Jesucristo que dio paso a la salvación del mundo.
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Oración, alabanza y testimonios, fortalecieron la fe de los muchachos que llenaron de calor y alegría el recinto educativo.
El presbítero Ely Sánchez, coordinador de la Pastoral Juvenil señaló que está es una manera de acercar y motivar a las nuevas generaciones a acercarse a Dios a través de María, a perseverar en la fe y a avivar la esperanza a través de la oración y la caridad.

Durante la jornada, niños y jóvenes presentaron un acto cultural religioso, se vivió un momento de oración y adoración eucarística, culminando con la misa, presidida por el obispo diocesano monseñor Lisandro Rivas.
En la homilía monseñor Lisandro Rivas expresó que en la participación y alegría de los jóvenes se aprecia una Iglesia viva, una Iglesia en camino.

«Qué bonito es iniciar el tiempo de Adviento de la mano de María. La lectura señala que el ángel Gabriel entró en la casa de la Virgen para anunciar la encarnación de Jesús. Hoy, el Señor también quiere entrar en la casa que es el corazón de cada uno de sus hijos».
Invitó a los jóvenes a abrir el corazón, a recomenzar la historia de la vida. «Jesús quiere resetear tu vida. Así como cuando reiniciamos los equipos celulares, parar un momento y escuchar la voz de Dios».

Al momento del Padre Nuestro, el obispo invitó a pedir por la paz del mundo entero.
Monseñor Lisandro Rivas anunció la sede del Encuentro Mariano del año 2026: la parroquia María Auxiliadora de Cordero.



