Culminada la Misa Pontifical en el marco de los 423 años de la aparición de la Virgen de la Consolación de Táriba, monseñor Mario Moronta, Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, pidió a la madre de Jesús interceder por los migrantes venezolanos.
A través de una oración recordó que muchas personas se encuentran afligidas, entre ellos, aquellos ciudadanos que huyeron del país en búsqueda de mejores oportunidades de vida.
“Te presentamos la indefensión y el dolor de tantísimos migrantes, menospreciados en los caminos del mundo, en la selva del Darién, en las costas del Caribe y del Atlántico, considerados como intrusos y material de descarte por las naciones que se creen dueñas del mundo y que, contradictoriamente, dicen ser adalides en justicia y paz”, indicó.
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Imploró por las necesidades de la sociedad, que padece a diario diversas vicisitudes. “Te pedimos auxilies a tantos hermanos nuestros que sufren la pobreza porque no tienen lo necesario, o no les alcanza el pobre salario que reciben, o porque están sufriendo tantos tipos de opresión”, señaló Monseñor.
Recordó que aquellas mujeres, y hombres que se van del país, caen en manos de los “coyotes”, quienes les ofrecen cosas que no cumplen.
“Te pedimos por quienes en tantas partes esclavizan a migrantes en los campos de concentración para ser manipulados, convertidos en obreros de sus maldades y para enriquecerse vilmente. Por los así, mal llamados coyotes, que junto con grupos de personas que se dicen de bien, venden paquetes de miseria y opresión a gente incauta y necesitada”, expresó Moronta.
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Del mismo modo, el Obispo pidió a quienes se dedican a los negocios de la droga, o aquellos que venden niños y adolescentes a la prostitución, o tráfico de órganos, para que estos flagelos en el mundo se terminen, ya que ningún ser humano puede estar a la venta para ningún fin.
También pidió la intercesión a la flor más bella de Los Andes venezolanos por los privados de libertad que se encuentran en los centros de reclusión esperando sentencia, sin embargo, quienes deben hacer justicia alargan los debidos procesos.
Maryerlin Villanueva