Pablo VI deja claro que la tarea de evangelizar no es exclusiva de un grupo selecto dentro de la Iglesia, sino que es una misión compartida por todos los fieles
Ya en el camino al calvario, el cuarto dolor de la Virgen fue el encuentro con su hijo, y más tarde, la crucifixión y agonía del Señor. Estos se conocen como el cuarto y quinto dolor
El Obispo Diocesano, tendrá la oportunidad de encontrar a cada uno de ellos, al igual que, realizar algunas actividades para fortalecer el vínculo filial del padre y pastor de la Diócesis con sus próximos neosacerdotes
Buscando sensibilizar a los voluntarios sobre la importancia de la salud mental y promover acciones solidarias para construir una sociedad más justa y humana