El Vicario General al inicio de su homilía hizo una disertación de gratitud a Dios por los 68 años de la Diócesis de Trujillo, que en los 468 de historia ha sido una pieza fundamental en la construcción de la identidad trujillana y su gentilicio
“La dimensión intelectual y la dimensión pastoral en la formación de los futuros sacerdotes van de la mano, porque la verdad que vamos conociendo a través del estudio, nos permite dar respuestas a las necesidades humanas, espirituales y sociales de las comunidades donde servimos”