Jesucristo ya lo anunció en su momento: “el Reino de Dios no va a venir en forma visible. La gente no dirá: Está aquí o Está allí. En realidad, Dios ya reina entre ustedes” (Lc 17, 20-21). Reina entre nosotros. Reina sin reinar en nosotros. No puede reinar si no reconocemos al Rey que reina