CARITAS PARROQUIAL SANTA LUCIA – RUBIO
En la parroquia Santa Lucia de Rubio encomendada al Presbítero Richard García nace el proyecto de Caritas parroquial llamado “Una Caricia de Dios”, con el fin de brindar alimento y vestido a los más vulnerables, haciendo así más actuales que nunca las palabras del Evangelio: “cada vez que lo hiciste con uno de éstos, mis humildes hermanos, conmigo lo hiciste” (Mateo 25, 46).
¿Cómo nace “Una Caricia de Dios”?
El Padre Richard desde hace aproximadamente cinco años, teniendo muy poco tiempo de haber tomado posesión de la parroquia Santa Lucia de Rubio, motivó a los fieles de esta comunidad a colaborar con la “Casa de Paso Divina Providencia”, ubicada en La Parada, Cúcuta, Colombia, un espacio edificado con el anhelo de ayudar a los migrantes venezolanos y colombianos retornados, gravemente afectados por la crisis social, económica y política en la que está sumida Venezuela. Esta experiencia marcó significativamente la vida de la comunidad parroquial sembrando en sus miembros el deseo de servir a quienes más lo necesitan.
Esta iniciativa de acompañamiento a tan noble obra se realizó inicialmente dos veces por semana los días martes y viernes, ayudando en la elaboración de los alimentos de más de 3000 personas. Luego se vio la necesidad de extender este trabajo apostólico al seno de la parroquia, por ende los días sábados se comenzó a dar el desayuno, a las personas más necesitadas de la parroquia y sus áreas circunvecinas.
Luego de la pandemia del Covid-19, la “Casa de Paso Divina Providencia” fue cerrada, eventualmente “no podíamos quedarnos sin hacer nada, por lo que pensamos en ayudar por lo menos dos veces por semana con comida a los más pobres, y decidimos hacerlo los días sábados, como ya lo veníamos haciendo, y también los domingos con el almuerzo. Entonces, pensamos en ponerle un nombre especial a estas jornadas de caridad y se nos ocurrió “Caricia de Dios”, porque al final es Dios quien dispone todo para que cada persona sea atendida y amada con la dignidad y el respeto que se merece por ser hija de Dios.” Manifestó el Padre Richard.
¿Es posible mantener este proyecto en Venezuela?
Pareciese imposible que una propuesta pastoral destinada a la atención alimentaria de más de 1200 personas diariamente, se mantenga hoy en Venezuela, pero quien da con generosidad recibe con generosidad, es así como esta obra se mantiene de una manera prácticamente milagrosa. “No recibimos ayuda del gobierno, ni de ninguna institución pública o privada, es la generosidad de la gente y su amor a Dios lo que mantiene esta obra.” Dijo el Padre Richard.
Para poder sostener esta obra el Padre Richard en compañía de servidores de la parroquia se dirige semanalmente a distintos pueblos del Estado Táchira, entre ellos Delicias, La Tendida, El Cobre, La Grita, y otros, con el fin de buscar alimentos. Del mismo modo acude a las personas de buen corazón para que colaboren económicamente y así poder comprar los insumos necesarios para el sostenimiento de esta obra de caridad.
La Caridad siempre será lo más importante
En la Carta del apóstol San Pablo a los Corintios está escrito “Si no tengo amor nada soy” (1Co 13,2), es decir, del amor, de la caridad depende todo. Esto lo tiene muy claro el Padre Richard, pues dice: “Esta obra es para hacer el bien, para ayudar, para vivir la caridad, para llevar a Cristo, para brindar una caricia de Dios. Hoy en Venezuela lo más fácil es quedarse cruzado de brazos y quejarse de todo ¡Pero no! La queja no trae nada bueno, además, no tengo derecho a quejarme porque hay gente que la pasa peor que yo. Esto lo aprendí cuando llegué a esta parroquia, pues me tocó dormir en un colchón entre las bancas del templo, hasta que poco a poco fuimos construyendo la casa cural, sin embargo yo me quejaba mucho, hasta que entendí que la queja no es de Dios, hay que aprender a vivir como cristianos, buscando hacer siempre el bien, sin quejarnos de nada y amando a todos.”
Una obra de la Iglesia
Es evidente que “una caricia de Dios” es una obra que nace del seno de la Iglesia para ayudarnos a ser Iglesia, una Iglesia en salida que tiene como fundamento principal el amor a Dios y al prójimo. “No es mi obra, no es la obra de la parroquia Santa Lucia, es la Iglesia la que llega, es Dios quien da de comer a sus hijos”, afirmó el Padre Richard.
¡Ayúdanos a ayudar!
Tú también estas llamado a vivir la Caridad, y lo puedes hacer colaborando con esta obra de Dios de la siguiente manera:
- Orando
- Donando alimentos o ropa
- Con tu aporte económico
Puedes hacer efectiva tu colaboración comunicándote a través de Instagram @cariciadeDios.
Diario Católico