“El misterio del sacerdocio es inmensamente grande. No podemos pensar en él separadamente de su centro: Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote”, expresó monseñor Mario Moronta, el 16 de noviembre en la parroquia San Agatón en Palmira, durante la ordenación presbiteral de Fray Ramón Alfredo Ruiz Ureña de la Orden de los Franciscanos Menores Conventuales.
El Obispo reflexionado en la homilía indicó que “por el sacramento del Orden, en sus diversos grados, quienes son elegidos se destinan al servicio del pueblo de Dios en el nombre del Señor. El evangelista Juan, al referirnos la oración sacerdotal de Jesús, nos ofrece algunos elementos interesantes del sello que reciben quienes son configurados a Cristo Sacerdote: Aunque están en el mundo, no son de él; antes bien, están consagrados en la verdad, que viene del Padre Dios”.
En la ceremonia participaron sacerdotes, religiosos, seminarista, familiares y amigos que acompañaron al neo sacerdote. El Obispo siguiendo el ritual de Ordenación Sacerdotal, pronunció la oración consacratoria e impuso las manos.
“Fray Ramón Alfredo. Desde su carisma de la sencillez apostólica, herencia del ‘poverello’ de Asís, va a comenzar a ser manifestación viva del Sacerdocio eterno y único de Jesucristo. Como lo ha sugerido él mismo, se identificará con el Redentor y hará de su vida una expresión eucarística de ese mismo Señor Jesús”, señaló el Obispo.
Los Frailes Menores Conventuales presentes en al Diócesis de San Cristóbal manifestaron su alegría por la ordenación presbiteral de un miembro de su comunidad religiosa. (Prensa DiócesisSC)