27.6 C
Venezuela
sábado, noviembre 22, 2025
HomeIglesiaEl santo de la Cruz

El santo de la Cruz

Date:

NOTAS RELACIONADAS

Papa León XIV nombra al Pbro. Elieser Rivero como nuevo Obispo de la Diócesis de San Fernando de Apure

Fue ordenado sacerdote el 18 de octubre del 2003 en la Iglesia Inmaculada Concepción de Yaritagua, incardinándose en la Diócesis de San Felipe

Serán beatificados dos sacerdotes italianos, mártires bajo el nazismo en 1944

El primer sacerdote mártir, don Ubaldo Marchioni, de Vimignano di Grizzana Morandi, en la provincia de Bolonia, nació en 1918, ingresó en el seminario diocesano a los diez años y a los 24 fue ordenado sacerdote en la catedral de Bolonia

Cambia la normativa sobre la presidencia de la Comisión para la Ciudad del Vaticano

Desde el 1 de marzo de 2025, por orden del Papa Francisco, la religiosa Sor Raffaella Petrini fue nombrada presidenta de la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano y la Gobernación

Hans García: “Nuestros muchachos darán todo para avanzar a semifinales” 

“Tenemos muchas remontadas épicas y se las trajimos como ejemplo a todos para que sepan que no todo está perdido y que el sábado será una bonita oportunidad para que escriban una nueva historia en la Liga FUTVE Junior”
spot_imgspot_img

 “¡Oh dulcísimo amor de Dios, mal conocido! El que halló sus venas descansó”, escribía San Juan de la Cruz en un grupo de sentencias escritas entre 1578 y 1580 reunidas en lo que terminó llamando Dichos de luz y amor. Sentencias que, según las fuentes, son sus primeros escritos de poderosa fuerza sintética a partir de los cuales germinaría toda su obra posterior.

En tiempos en los cuales el ruido y la estridencia han invadido nuestra vida y todos nuestros espacios, el gozo infinito que nos reserva la lectura de San Juan de la Cruz nos ayuda a reencontrarnos y reconciliarnos con aquellas dulces ideas que nos tejiera en el alma desde su alma enamorada: “Míos son los cielos y mía es la tierra; mías son las gentes, los justos son míos, y míos los pecadores; los ángeles son míos, y la madre de Dios y todas las cosas son mías, y el mismo Dios es mío y para mí, porque Cristo es mío y todo para mí. Pues ¿Qué pides y buscas, alma mía? Tuyo es todo esto y todo es para ti. No te pongas en menos ni repares en migajas que se caen de la mesa de tu Padre. Sal fuera, y gloriate en tu gloria; escóndete en ella y goza, y alcanzarás las peticiones de tu corazón».

Lea también: Jóvenes con rosario en la mano

San Juan de la Cruz fue un místico católico del siglo XVI español y, junto con su coetánea Santa Teresa de Jesús, el más significativo de la escuela carmelitana. Figura de primer nivel en la historia de las letras españolas, período de florecimiento y auge de la literatura espiritual religiosa. La poesía y los tratados sobre el género reflejan la tensión de la vida espiritual de aquel tiempo, tan agitada y saturada de eventos, de ideas y de lances inquisitoriales, dentro de los que se vio envuelto nuestro santo.

Su obra cuenta con una larga tradición de estudios filológicos. Sus obras mayores  Noche Oscura, Cántico Espiritual, Llama de Amor Viva son poesías comentadas: los versos, que despliega la trama del amor místico entre Dios y el alma son interpretados en los tratados espirituales, destinados a explicar a los “principiantes” el modo de “subir hasta la cumbre del monte, que es el alto estado de la perfección, que aquí llamamos unión del alma con Dios”.

Comenzó a vivir con intensidad una vida purgativa dentro de la cual el alma comienza a despojarse de todas las cosas que la atan hasta alcanzar la vía iluminativa. Inició su peregrinaje tallando cristos de madera mientras pensaba ardientemente en trabajos que lo ayudaran a padecer por el Señor. Y mientras más profundizaba en sus experiencias más crecía su talento, y mientras más crecía su talento, más notoria se hacía la envidia que despertaba entre sus propios hermanos. Una envidia que no sólo se conformó con encerrarlo, sino con cebarse en la idea de desterrarlo a México. Envidia que transformaba en amor, un amor que derramó en su obra para enseñar a otros el camino del amor.

San Juan de la Cruz es una luz en la oscuridad, sereno de las noches oscuras, es decir, el encargado de vigilar las calles regulando la iluminación en horas nocturnas. Una luz que nos enseña los modos de tener, de ir y de no impedir al Todo esperando hallar quietud y descanso en el espíritu “porque, como nada codicia, nada le impele hacia arriba, y nada le oprime hacia abajo, que está en el centro de su humildad, que cuando algo codicia, en eso mismo se fatiga”. Paz y bien, a mayor gloria de Dios.

 Valmore Muñoz Arteaga

NOTAS RELACIONADAS

Papa León XIV nombra al Pbro. Elieser Rivero como nuevo Obispo de la Diócesis de San Fernando de Apure

Fue ordenado sacerdote el 18 de octubre del 2003 en la Iglesia Inmaculada Concepción de Yaritagua, incardinándose en la Diócesis de San Felipe

Serán beatificados dos sacerdotes italianos, mártires bajo el nazismo en 1944

El primer sacerdote mártir, don Ubaldo Marchioni, de Vimignano di Grizzana Morandi, en la provincia de Bolonia, nació en 1918, ingresó en el seminario diocesano a los diez años y a los 24 fue ordenado sacerdote en la catedral de Bolonia

Cambia la normativa sobre la presidencia de la Comisión para la Ciudad del Vaticano

Desde el 1 de marzo de 2025, por orden del Papa Francisco, la religiosa Sor Raffaella Petrini fue nombrada presidenta de la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano y la Gobernación

Hans García: “Nuestros muchachos darán todo para avanzar a semifinales” 

“Tenemos muchas remontadas épicas y se las trajimos como ejemplo a todos para que sepan que no todo está perdido y que el sábado será una bonita oportunidad para que escriban una nueva historia en la Liga FUTVE Junior”

DC.RADIO

RECIENTES

spot_img

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here