La Iglesia en Polonia conmemoró este 22 de febrero la primera aparición de Jesús de la Divina Misericordia a Sor Faustina, monja canonizada en el año 2000, a quien le encomendó la misión de propagar el culto a la Divina Misericordia, con la imagen de Él tal como se le había aparecido, y con la inscripción de la oración “Jesús, en Ti confío”, para transmitir el mensaje de salvación al mundo entero.
La celebración estuvo presidida por Monseñor Jan Romeo Pawłowski, Secretario para las Representaciones Pontificias, en el convento de Plock, donde ocurrieron las apariciones. El prelado recordó que la oración “Jesús, en Ti confío” se traduce a cientos de idiomas y es rezada por millones de católicos en el mundo, y que es una completación del Padre Nuestro, pues una se dirige al Padre Creador, y la otra al Hijo Misericordioso.
El Papa Francisco ha expresado su cercanía con la Iglesia polaca y con esta celebración, dirigiendo una carta al Obispo de Plock, Mons. Piotr Libera, recordando que “La humanidad no conocerá la paz hasta que se dirija a la fuente de mi Misericordia”, según la santa relató en su diario, donde plasmó todo lo revelado a ella por el mismo Jesucristo.
Por su parte, el presidente de Polonia, Andrzej Duda, envió un mensaje con motivo de esta celebración, donde resaltó que “la humanidad necesita la solidaridad y la esperanza que tanto resuenan en los escritos de nuestros dos santos, especialmente en los tiempos modernos”, refiriéndose a Sor Faustina y San Juan Pablo II.
En el país europeo, el culto a la Divina Misericordia es ampliamente practicado, y el Santuario de la Divina Misericordia, erigido en Vilna, donde sor Faustina tuvo la mayoría de las visiones y donde reposan sus reliquias, es visitado por peregrinos locales y extranjeros, que fervorosamente piden para obtener gracias por intercesión de la Santa. El Santuario fue visitado por un millón y medio de jóvenes peregrinos en el año 2016, en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia.