La tipografía ya estaba en suelos tachirenses y con ello los sueños, proyectos, anhelos, propósitos y sobre todo comunión con la Iglesia que pedía ardiente leer el mensaje de la Buena nueva. El Boletín eclesiástico que ya era considerado lectura de primera mano en aquellos que con 0,6 bs podían adquirir tal recurso, ahora esperaban lo que Mons. Sanmiguel había prometido: La Hojita Diocesana que sería distribuida gratuitamente los Domingos en las diversas parroquias, afiches, hojas que estuviesen al servicio de la Buena Prensa y por supuesto la creación del Diario Católico, el periódico de corte religioso.
Es así como el Diario Católico es creado el día 14 de Mayo de 1924 por Mons. Sanmiguel, quien daría la dirección al vocero de la Diócesis y hombre experimentado en el periodismo regional, su sede oficial son un edificio contiguo a la Parroquia El Sagrario Catedral, de la misma manera nombraría personal calificado y de buena acogida en la opinión pública, escogiendo como director del diario al Dr. Ramón Velásquez, en cuanto a la redacción seria otorgada el seminario cuyo administrador era Domingo R Vivas. Un diario editado e impreso sobre cuatro páginas como inicio de la flamante prueba, así lo atestigua Mons. Sanmiguel en la Editorial de la inauguración y presentación a la feligresía de tan grande recurso comunicacional para el establecimiento de la buena prensa en el Táchira
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Aparece el Diario Católico en reducido formato, era nuestro deseo haberlos presentado algo mayor pero no hemos querido hacer de pronto ensayos que puedan llevarlo al fracaso. Preferimos, por tanto presentarlo pequeño a nuestros lectores con la firme esperanza de que se haga más grande y aumentando sus páginas. Todo depende de la buena acogida que el público nos dispense. Tenemos la firme convicción de que los católicos de la Diócesis recibirán con gratitud este Diario y que su protección habrá que comunicarle cada vez mayores bríos.
En efecto, por medio de la buena recepción del público amante a la lectura y buena prensa se fueron sumando empresas que querían publicitar en el Diario, debido a la buena recepción asimismo, la directiva vinculó más páginas conservando el mismo tamaño estándar. Un año después el Diario Católico había adquirido otra connotación en el diseño, diagramación, concepto y presentación. De la misma manera, por medio de la fuente editada del sacerdote Luis Gilberto Santander se pudo conocer sobre la impresión del pueblo tachirense acerca del acontecimiento del galardón dado al Diario Católico, que consiste en un diploma y medalla de oro, conferido bajo el nombre de Premio Nacional de periodismo Juan Vicente González, actualmente llamado Premio Nacional del Periodismo Simón Bolívar. Otorgada a la institución en el año 1963 por su tesonera labor en el campo periodístico y por la siembra ininterrumpida de ideales cívicos y cristianos. Asimismo el Diario Católico contó con directores de gran empuje para esta institución eclesiástica.
La nueva imagen del Diario
Con la adquisición de la nueva maquinaria, un nuevo y moderno sistema de impresión en offset. Significó una gran alegría y triunfo para el pueblo tachirense, asimismo como a culminación del edificio del medio de comunicación, ubicado en la misma manzana de la catedral y del palacio episcopal; claramente dejó sentado el Obispo quien regia para ese tiempo Mons. Alejandro Fernández Feo mencionando que esa obra tenia nombre y apellido, que no es del Obispo de San Cristóbal, y ese es el padre Nelson Arellano Roa.
Actualmente el Diario Católico es miembro de la Unión Católica Latinoamericana De Prensa (U.C.L.A.P), de la Unión Católica Interna de Prensa (U.C.I.P), del Bloque Venezolano de Prensa y del Bloque de la Prensa de Provincia venezolana. Por su parte pasa a ser en el año 2003 Fundación Diario Católico, institución encargada de llevar el mensaje cristiano a través de los medios de comunicación. En mayo de 2013, el Diario Católico había publicado 29 mil 200 ediciones. En ese mismo año, el sitio web oficial incluyó DC.Radio, una emisora en línea y DC. Televisión, un canal de televisión por internet para la transmisión de eventos especiales de la Iglesia.
Desde finales de 2012, ha enfrentado problemas de falta de papel periódico, tinta y otros insumos necesarios para la impresión, como consecuencia de la escasez en Venezuela. Debido a esto, el número de cuerpos del diario se redujo de cuatro a dos, disminuyó el tiraje, dejó de circular los fines de semana y el formato del diario pasó a ser de estándar a tabloide, más tarde se difundiría como un semanario y asumiría los aportes técnicos de una nueva época.
