Este 8 de octubre en el Santuario José Gregorio Hernández, ubicado en el hospital del Seguro Social, Mons. Lisandro Rivas, Obispo de San Cristóbal, en compañía del Rector del santuario, Pbro. Emmanuel Pernía y del Vicario Episcopal de Comunicación, Pbro. Jhonny Zambrano, llevó a cabo un conversatorio inspirado en la obra y virtudes más relevantes del beato José Gregorio Hernández,
Durante el conversatorio, monseñor discernió de los distintos tópicos que se vislumbran en la vida y obra del nuevo santo, de quien destacó su dedicación a la medicina y la ciencia, su profunda fe cristiana, y su inmensa caridad hacia el prójimo.
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Reiteró el pastor diocesano que desde la familia hay un creciente y constante acercamiento a la fe que conlleva a la formación de la santidad. Esto se evidencia en la entrega del doctor José Gregorio en atender, acompañar y apoyar a los más vulnerables, una característica que hoy día todos reconocen al llamarlo el “médico de los pobres”.

“Su labor como médico se reflejó en su generosidad inusual (…) ofrecía consultas gratuitas a pacientes de bajos recursos, practicando una medicina basada en la empatía, la dignidad y el respeto por cada persona”.
Monseñor explicó que la esencia de la santidad del Dr. Hernández está expresada en una práctica heroica y llena de convicción de sus virtudes sobre la base teológica y humana.

En cuanto a las características teologales, monseñor explicó que la Fe del santo la exteriorizó con la convicción de seguir el camino y la voz de Dios. Sumado a ello, la Esperanza, inspirada en la espera de todo lo bueno que nos da el Creador, como Padre, y la Caridad, como punto neurálgico de su vida; virtudes que son las pruebas indiscutibles de un hombre que por Dios trazó el camino desde la voluntad de Dios.
“Sus virtudes humanas lo hicieron un hombre íntegro, exigente y puntual en el cumplimiento de sus deberes (…) mostró una gran disciplina interior en su formación y en su labor como médico e investigador y, a pesar de su éxito académico y profesional, siempre mantuvo su fe».
Vicaría Episcopal de Comunicación