El pasado lunes la parroquia Nuestra Señora del Rosario en la ciudad de San Cristóbal, celebró su fiesta patronal, cuya eucaristía fue presidida por el obispo de la Diócesis de San Cristóbal, monseñor Mariol Moronta en compañía del párroco monseñor Humberto Urbina, además de algunos sacerdotes del clero diocesano.
Lea también: Queniquea celebró a su Santa Patrona, Nuestra Señora del Rosario
El obispo resaltó en su homilía que, el verdadero título de la Virgen María es Bienaventurada, ya que refleja el ejemplo de la santidad. Sostuvo que el Rosario es un resumen del evangelio y de la vida de Jesús. Por lo tanto, quien ora con el Rosario es bienaventurado y porque lo es, debe anunciar a Cristo, desde su realidad particular.
Al concluir la ceremonia, Mons. Urbina, párroco de esta localidad, expresó su profundo sentimiento de agradecimiento a Mons. Mario, al igual qué agradeció a Dios por los 25 años de la llegada del quinto obispo de la Diócesis.
Mons. Moronta agradeció a todos por estos 25 años como pastor de esta Iglesia local de San Cristóbal. Anunció que está próximo a cumplir el 50 aniversario de vida sacerdotal, por eso compartió su gratitud diciendo: “ he vivido más de la mitad de mi ministerio sacerdotal en el Táchira, con ustedes, y no me arrepiento, porque como dice en el evangelio: ustedes son mi madre y mis hermanos”.
A la celebración asistieron seminaristas, servidores y fieles laicos que peregrinan en esta comunidad.
Prensa DiócesisSC