La mesa de Combustible del Estado Táchira invitó a los conductores a participar del Censo Regional Automotor que se hará en cada municipio a través del Sistema de Control de Combustible Fronterizo (SISCCONF) para actualizar la base de datos para el año en curso.
El censo se realizará desde el lunes 11 hasta el viernes 22 de noviembre para particulares, y los vehículos de carga liviana serán censados desde el 25 de noviembre al 7 de diciembre. El registro de los vehículos será necesario para poder surtir gasolina, o de lo contrario, quedarán por fuera del sistema y no podrán surtir en ninguna estación de servicio del estado.
Con esta medida, las autoridades buscan dar solución a la problemática que se viene presentando en el estado desde hace algunos meses donde los conductores deben someterse a largas colas de varios días para poder surtir, y esto en diversos casos para comerciarla ilegalmente en moneda extranjera en la zona fronteriza con Colombia.
Respecto a esto, los usuarios alegan que la medida es insuficiente para frenar la actividad ilegal, y que en vez de resolver problemas, solo los agravará, pues si en las bombas de gasolina las colas se prolongan hasta por 4 o 5 días, para el censo podrían ser por mucho más tiempo.
El Censo no ha tenido la difusión necesaria
Algunos conductores presentes en las colas de distintas estaciones de servicio de la ciudad aseguraron no conocer del censo ni haber recibido la información para poder registrar sus automóviles. Tal es el caso de Wilson Nieves, quien se encontraba el jueves en la noche en la cola de la estación de servicio de El Castillo de la Fantasía, en la avenida España, y dijo no haber escuchado del censo, lo que a su juicio debería ser difundido por todos los medios de comunicación y los organismos competentes para que todas las personas puedan participar.
También Alejandro Gutiérrez manifestó que la información que han dado a conocer es muy escasa, y se basa más en el “voz a voz” de los mismos usuarios que se encuentran en las colas, pero no en una fuente oficial, lo cual permite que se creen rumores que desinforman y generan más zozobra en la población.
Mitad de semana esperando surtir
Mientras las autoridades regionales intentan solventar la situación, los tachirenses continúan esperando tres, cuatro o hasta cinco días que lleguen las gandolas a las estaciones de servicio para poder surtir sus autos de combustible.
Estas colas alcanzan varias cuadras de longitud en distintos sectores de la ciudad de San Cristóbal, incluso en los más concurridos como lo es la Quinta Avenida del centro, donde se extiende la cola de la estación de servicio del Parque Sanmiguel ubicada en La Ermita.
Quienes se encontraban en la cola a la altura de Corposalud el viernes a mediodía, habían llegado entre la noche del martes y la mañana del miércoles, teniendo un aproximado de 400 carros por delante. “Hasta el momento no nos han marcado los carros, pero dicen que dependiendo de lo que llegue en la gandola, marcarán hasta 500 carros”, aseguró Pedro Jiménez, quien llegó desde el martes a las 8 de la noche al lugar.
Por su parte, Alirio Fernández, que llegó al mismo tiempo desde Rubio dijo que “si no llega gasolina, toca regresar el martes que es el otro turno semanal para echar, pero ya nada es seguro, porque hay bombas donde no ha llegado gasolina hasta en una semana, así que toca a la mano de Dios esperar y tener fe”.
En peligro los vehículos sin dueño
Para este censo, la diputada Nellyver Lugo indicó que solo podrán realizar el registro los propietarios de los vehículos o los usuarios con poderes notariados emitidos por los mismos. Esto pone en vilo la participación de muchos autos en el censo, pues los titulares se han ido del país dejándolos a cargo de familiares o amigos sin tener un respaldo legal.
Así ocurre con Yonatan Vargas, cuyo vehículo es del papá, quien se encuentra en Sogamozo, Colombia, y aún no sabe si le sea posible viajar a Venezuela para poder participar en el censo. “Mi papá pidió un permiso no remunerado en el trabajo para poder venir en el transcurso de la semana y hacer el censo, o hacer un poder para que yo pueda realizar los trámites relacionados con la camioneta, pero allá las cosas son diferentes y el jefe no le ha dado respuesta aún. Si no se lo permiten, nos quedaremos por fuera del registro y tocará parar la camioneta en la casa”, manifestó el joven.
Los conductores aseguran que las medidas tomadas por las autoridades a lo largo de estos años no han servido para frenar las mafias, y consideran que esta no será la excepción, sin embargo participarán del censo por la necesidad de continuar surtiendo gasolina, esperando que algún día no muy lejano se pueda regular la situación del combustible en el Táchira.
Milagros García / Diario Católico