El pasado 31 de agosto una capilla del Hospital General de Especialidades Dr. Javier Buenfil Osorio, en México fue desmantelada, en cuyo sitio la custodia que guardaba al Santísimo fue quitado a punta de martillo y el recinto religioso clausurado.
Trabajadores del citado gobierno sostuvieron que la orden era retirarlo, en medio de la insistencia del personal médico y enfermero que clamaba que no lo hicieran, puesto que los pacientes y familiares buscaban consuelo en él.
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El Gobierno estatal del partido de izquierda Morena tuvo que echar marcha atrás; y tras de tres semanas de negociaciones, el obispo de Campeche, José Francisco González, anunció el 21 de septiembre que el Santísimo volvía a la capilla. Y que los fieles podrían volver a tener el auxilio espiritual de su presencia.
Las imágenes de las monjas que atendían el cuidado de la capilla y a los enfermos del Hospital General de Especialidades, cargando los cuadros y los objetos que estaban dentro del lugar desmantelado, dieron la vuelta a todo México. Muchos compararon lo que estaba sucediendo en Campeche con las exacciones del Gobierno sandinista en Nicaragua.
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“Después de una seria investigación de los hechos, con buena disposición y diálogo entre las autoridades civiles y eclesiales, el pasado 21 de septiembre, logró abrirse de nuevo al público este espacio dedicado a la oración; donde todo fiel cristiano podrá visitarlo para entrar en contacto con el Señor”. Así lo dijo en el comunicado oficial el vocero de la diócesis, el padre Gerardo Casillas.
En la pequeña capilla aledaña al Hospital General de Especialidades se encuentra el Santísimo Sacramento para ser adorado. A partir de su retorno a casa, se activan, también, las horas santas y las celebraciones de Misa cada jueves, como se venía haciendo desde hace mucho tiempo.
“Gracias a la buena disposición de las autoridades civiles, la Secretaría de Salud y, después de una desavenencia dialogada, se pudo instalar la capilla; para ser un lugar de oración, meditación y fortalecimiento espiritual para los enfermos y sus familiares”, apuntó el padre Casillas en su comunicado.–
Maryerlin Villanueva
Periodista Diario Católico