Buscando sensibilizar a los voluntarios sobre la importancia de la salud mental y promover acciones solidarias para construir una sociedad más justa y humana
“Cada miembro del Vía Crucis está cumpliendo una promesa (…) el Vía Crucis no es una actividad teatral es un acto de fe que vive cada uno de los participantes de esta actividad”
A pesar de venir al mundo sin su brazo izquierdo, Madre Carmen creció entre sus hermanos con independencia y espíritu de liderazgo, dando ejemplo a su familia para sobrellevar su condición, la que jamás le impidió desarrollarse