«Cuando nos parece que todos nos ignoran, que a nadie le interesa lo que nos pasa, que no tenemos importancia para nadie, él [Jesús] nos está prestando atención»
Es necesario recordar que quien ayuda y acompaña en el proceso como director espiritual o confesor, ha de haber tenido la ocasión de trabajar sobre sí mismo, reconociendo su proceso de sanación y crecimiento integral
Mientras la música avanza, me pregunto si Jesús sigue siendo la alegría del hombre. Vuelvo a las primeras páginas del Génesis cuando Adán y Eva se escondieron entre los árboles del jardín, para que Dios no los viera
La música transmitida con villancicos y aguinaldos durante estos días suenan en tantos hogares, de forma magistral y evangelizadora nos ha acompañado durante estas nueve Misas de Aguinaldo y en las posadas
Jesús me defiende de toda pena. Él es la fuerza de mi vida, el gozo y el sol de mis ojos, el tesoro y la delicia de mi alma; por eso no quiero dejar ir a Jesús fuera de mi corazón y de mi vista”