Durante la homilía el obispo auxiliar aseguró que dejarlo todo respondiendo a la vida que el Señor nos deja es la mayor recompensa que se puede esperar
El valor de este compromiso, afirma, "se extiende mucho más allá de los confines del Vaticano. Al priorizar la educación climática, la Santa Sede envía un mensaje claro a todo el mundo católico
“La noticia de que el Papa nos recibiría nos sorprendió positivamente” recuerda con emoción Elisabeth Román, presidenta del Consejo Nacional Católico de la Pastoral Hispana
Celebrar la fiesta de Nuestra Señora del Rosario nos invita a propiciar encuentros que generan vida. También alabar a Dios y a permanecer en su gracia. Meditar, contemplar, orar con los misterios del Santo Rosario, meditar la vida de Cristo seguir su ejemplo"