La protesta pacífica convocada en toda Colombia para este 21 de noviembre en contra del presidente Iván Duque ha perdido su fin pacifista al iniciarse enfrentamientos y disturbios en algunas ciudades del país entre la policía y los manifestantes.
Desde tempranas horas de la mañana se inició un paro nacional con movilizaciones rechazando la gestión presidencial de Iván Duque, actual primer mandatario colombiano quien no tiene más de año y medio en el cargo. Hasta horas del mediodía se había reportado la protesta totalmente pacífica, sin confrontaciones, solo con bloqueos de transporte respondiendo a la paralización total del país; pero pasadas las dos de la tarde (hora local colombiana) se comenzaron a hacer públicos en las redes los reportes de enfrentamientos entre algunos protestantes, quienes fueron reprimidos con gases lacrimógenos y tanques de agua usados por la policía para dispersar la concentración que pretendía llegar al terminal 2 del aeropuerto.
Así mismo, varias estaciones de los sistemas de transporte de algunas ciudades tuvieron que ser desalojados por la situación irregular que se presentaba, reembolsando el dinero a los usuarios que ya habían cancelado sus pasajes, debido a la presencia de multitudes que impedían el tránsito a las unidades de transporte, e incluso por represión en algunas estaciones del Transmilenio, en Bogotá.
En la ciudad de Cali, más temprano, tres encapuchados intentaron infiltrarse en la marcha, a lo que los manifestantes respondieron sacándolos del grupo y denunciando que intentaban generar caos en la concentración que se desarrollaba en paz, aunque la prensa local reportó destrozos en algunas líneas de transporte.
De igual manera, las redes sociales no han dejado de lado su labor informativa con una difusión en directo de los acontecimientos por parte de los presentes en las manifestaciones, e incluso algunos personajes políticos han dejado su opinión del por qué protestan hoy, acompañando al pueblo colombiano en su descontento.
Por su parte, el presidente Iván Duque reiteró su apoyo a la libertad de expresión de los colombianos, y declaró que fueron activados dispositivos especiales de seguridad para garantizar el orden en la nación. “Al tiempo que reconocemos el valor de la protesta pacífica, también garantizaremos el orden”, acotó.
Las protestas en contra de Iván Duque, presidente de Colombia, son impulsadas por un fuerte descontento en la población ante sus políticas económicas y sociales donde, entre otras, se cuentan la reforma del mercado laboral en perjuicio de los trabajadores, y la desprotección de las comunidades originarias, donde han muerto 134 campesinos a manos de grupos irregulares “ante la mirada inerte del gobierno”.