El canciller chileno Teodoro Ribera pidió este viernes al Consulado de Venezuela en Santiago que se haga responsable de cientos de venezolanos que acampan fuera de su embajada desde hace al menos dos semanas, a la espera de obtener ayuda para retornar a su país.
En una grabación difundida por la cancillería chilena, Ribera sostuvo que visitó «de forma anónima» la calle donde se encuentra la Embajada de Venezuela, en la comuna de Providencia, en Santiago.
Allí constató la situación de cientos de venezolanos instalados en carpas ocupando gran parte de la calle y soportando la caída de las temperaturas y lluvias del otoño austral con mínimas de 4 grados durante las noches.
Ante esto, Ribera pidió a las autoridades venezolanas «que se hagan cargo de la responsabilidad que le corresponde a todo consulado de darle protección a sus connacionales y ayuden a las personas que están acampando fuera de la Embajada con intenciones de regresar a Venezuela».
Con más de 400.000 personas, los venezolanos se han convertido en la colonia de extranjeros más numerosa en Chile en apenas seis años, en el marco de una ola migratoria desatada por la crisis de su país.
Ribera comprometió además su colaboración para que el Consulado de Venezuela facilite un avión que traslade a estas personas a su país. Unos 250 venezolanos ya retornaron hace dos semanas.
La población de inmigrantes en Chile alcanza a los 1,5 millones de habitantes, poco menos del 10% de los casi 18 millones de habitantes.
Estas comunidades han resultado particularmente golpeados por el estallido social del 18 de octubre pasado, y ahora por la crisis del coronavirus, muchos de ellos se quedaron sin trabajo ni vivienda.
Otras colonias de peruanos y bolivianos también acamparon en el último mes fuera de sus representaciones diplomáticas en Santiago para clamar ayuda. En el caso de los bolivianos, más de un millar logró cruzar su frontera, cerrada por el coronavirus desde abril.
En el caso de los peruanos, unos 1.200 que están varados en la ciudad de Arica (norte chileno) podrán retornar a su país luego que los gobiernos de Chile y Perú acordaran realizar un operativo para el intercambio de personas desde este viernes.
En el marco de este acuerdo, unos 300 chilenos y 86 argentinos podrán cruzar la frontera peruana, cerrada desde marzo.