El gobierno de Jair Bolsonaro en Brasil ordenó este miércoles 29 de julio la reapertura de las fronteras aéreas para los extranjeros, después de restringir los vuelos comerciales desde marzo, cuando el país sudamericano empezó su lucha contra la pandemia.
La ordenanza, publicada en un Boletín Oficial, suspende la prohibición de viajes desde y hacia Brasil, aunque mantiene ciertas restricciones y condiciones para los viajeros que deseen ingresar al país, reseñó Reuters.
En este sentido, la nueva regla estipula que los extranjeros que ingresen por vía aérea con plan de mantener una estadía de hasta 90 días, deberá presentar un comprobante de compra de un seguro de salud válido en el país, que tenga cobertura durante todo el período de tiempo del viaje.
Por otra parte, solo un grupo de aeropuertos estarán habilitados. Hasta ahora, mantendrán sus puertas cerradas Mato Grosso do Sul, Paraíba, Rondônia, Rio Grande do Sul y Tocantins.
El acceso a Brasil, sin embargo, se mantiene restringido por otras vías. Ingresar por carretera u otros medios terrestres o por transporte acuático está prohibido.
La decisión de apertura fronteriza se concreta mientras el país sufre los abates de la covid-19. Este miércoles Brasil registró un récord 1.595 muertes en 24 horas, por lo que su cifra total de decesos subió a 90.134; mientras que los contagios también alcanzan números nunca antes vistos, con 69.074 pacientes positivos en un solo día, alcanzando 2.552.265 contagios en cuatro meses.
Hace apenas una semana Brasil reportó su mayor número de casos semanales desde que inició la pandemia, con 319.653 infecciones, por lo que el brote de covid-19 se encuentra en su punto más álgido.