Es necesario recordar que quien ayuda y acompaña en el proceso como director espiritual o confesor, ha de haber tenido la ocasión de trabajar sobre sí mismo, reconociendo su proceso de sanación y crecimiento integral
Mientras la música avanza, me pregunto si Jesús sigue siendo la alegría del hombre. Vuelvo a las primeras páginas del Génesis cuando Adán y Eva se escondieron entre los árboles del jardín, para que Dios no los viera
La música transmitida con villancicos y aguinaldos durante estos días suenan en tantos hogares, de forma magistral y evangelizadora nos ha acompañado durante estas nueve Misas de Aguinaldo y en las posadas
Jesús me defiende de toda pena. Él es la fuerza de mi vida, el gozo y el sol de mis ojos, el tesoro y la delicia de mi alma; por eso no quiero dejar ir a Jesús fuera de mi corazón y de mi vista”
Hoy, aquí y ahora, a ti hermano, a ti hermana, protagonista de las situaciones que surgen cada día, conscientes de la condición de cristianos que debemos manifestar como testimonio de vida, la invitación es clara: abrir el corazón y la mente a la acción misericordiosa de Dios
Es la Navidad de la soledad para muchos, de la distancia física que nos aborda; la Navidad del que lucha entre la vida y la muerte en un centro de salud; la Navidad de los migrantes que sin rumbo fijo son humillados por quienes creen tener poder para ello; la Navidad de los ancianos, niños, jóvenes y adultos que cada día ponen su confianza en Dios y saben que siempre está allí, presente y lleno de amor y ternura